Los agentes biológicos son definidos como los microorganismos, incluyendo los genéticamente modificados, las culturas de células y los endoparásitos humanos susceptibles a provocar infecciones, alergias o intoxicaciones en el cuerpo humano.
Los agentes biológicos pueden así significar una potencial amenaza para la salud humana (riesgo biológico). En determinado contexto de trabajo, los colaboradores pueden estar expuestos a agentes biológicos con riesgos para su salud en muchas actividades, específicamente:
- Laboratorios de investigación;
- Servicios hospitalarios;
- Laboratorios clínicos y de diagnóstico;
- Mataderos;
- Recogida y tratamiento de basuras;
- Tratamiento de aguas residuales;
- Diversas ramas de la industria.
Los agentes biológicos pueden ser clasificados, de acuerdo con el riesgo infeccioso que presentan:
- Grupo 1: Improbable que cause enfermedad;
- Grupo 2: Puede causar enfermedad pero no se extiende para la comunidad y existen medidas eficaces de tratamiento y profilaxis;
- Grupo 3: puede causar enfermedad severa en el ser humano, puede extenderse por la comunidad, existen medidas efectivas de tratamiento y profilaxis;
- Grupo 4: Causa enfermedad severa en humanos, se disemina por la comunidad y no existen medidas efectivas de tratamiento y profilaxis.
El agente biológico que no pueda ser rigurosamente clasificado en uno de los grupos definidos en el número anterior debe ser clasificado en el grupo más elevado en que puede ser incluido.
Vías de transmisión;
- Inhalación;
- Ingestión;
- Absorción cutánea (piel y mucosas);
- Intravenoso/Intramuscular;
- Urogenital.
Las vías de transmisión pueden también ser clasificadas como:
- Directas (cuando ocurre contacto físico con la persona infectada);
- Indirectas (a través de materiales/objetos o un vector de transmisión, como por ej.: insecto).