Presentación de la bacteria Clostridium botulinum
El agente causante del botulismo es una biotoxina producida por la bacteria Clostridium botulinum. La Bacteria C. botulinum es una bacteria anaerobia estricta, que persiste bajo la forma de esporas durmientes cuando las condiciones ambientales son adversas. Las esporas son resistentes al calor y a la sequía, pudiéndose mantener viables durante años, encontrándose ampliamente distribuidos en sedimentos de áreas húmedas. Estas esporas pueden ser encontradas en tejidos de la mayoría de las especies que viven en este tipo de hábitat, incluyendo insectos acuáticos, moluscos, crustáceos, así como muchos vertebrados incluyendo aves y peces. Las esporas pueden también estar alojadas en los tejidos de aves siendo distribuidos para nuevos hábitats a través de las heces.
La toxina del botulismo es producida apenas después de la germinación de las esporas, cuando el organismo está creciendo y multiplicándose activamente. A pesar de que la bacteria induzca un mecanismo para la producción de la toxina, el gen que codifica la proteína de la toxina es en realidad transportado por un virus o fago que va a infectar la bacteria C. botulinum. Infelizmente poco se sabe sobre los mecanismos asociados al control de la replicación e infección del fago dentro de la bacteria. Se cree que varios factores podrán tener un papel relevante, incluyendo la estirpe de la bacteria huésped y características ambientales, tales como temperatura y salinidad.
Tal como cualquier bacteria, la temperatura es un factor importante para su multiplicación. En el C. botulinum, la temperatura óptima de crecimiento en laboratorio es entre 25º y 40º. La mayoría de los brotes de botulismo ocurre durante el verano y otoño, cuando la temperatura ambiente es elevada. Sin embargo, ya fueron registrados en algunos locales brotes de botulismo que ocurren durante el invierno, pero éstos se deben generalmente a una toxina residual que fue producida en el verano anterior.
Las especies adquieren la enfermedad a través de la ingesta de sustancias intoxicadas. El botulismo es por ello considerado una causa de muerte ambiental puesto que supone una intoxicación y no una enfermedad letal infecciosa.
Son siete los diferentes tipos de toxinas producidas a través de estirpes de C. Botulinum, designadas del tipo A a G. (Tabla I).
Tabla I. Diversos tipos de toxina de la bacteria C. botulinum y las principales especies afectadas.
Tipo de toxina | Animales afectados | Riesgo para el hombre |
A | Aves de cría (ocasionalmente) | Elevado |
B | Caballos | Elevado |
C | Aves salvajes, ganado, caballos y aves de cría. | Bajo |
D | Ganado | Bajo |
E | Aves piscícolas | Elevado |
F | * | Desconocido |
G | * | Desconocido |
* Raramente detectadas en la naturaleza; existe muy poca información para evaluar las especies afectadas.
Palabras clave: Bacteria, Botulismo, Biotoxina.
References:
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