El análisis externo, o análisis de la envolvente externa consiste en una evaluación de las diversas variables de la envolvente de la organización de forma a evaluar lo atractivo que es el sector y de forma a proveer pistas para la formulación de los objetivos organizacionales y para ayudar en la selección de las estrategias a seguir.
Para ese análisis se desarrollaron diversos modelos que buscan sintetizar los aspectos más importantes a ter en cuenta y efectuar una evaluación/caracterización del sector o de los mercados donde la organización actúa. Adriano Freire, por ejemplo, propone el cálculo de un indicador que procura evaluar el atractivo de determinado sector o negocio a través de la utilización de tres medidas del atractivo potencial: el valor de las ventas (V), a tasa de crecimiento de las ventas (T) y la rentabilidad operacional de las ventas (R). Aplicando la fórmula V x (1 + T)t x R, en que t representa un determinado horizonte temporal, se obtiene el valor del atractivo sectorial.
Otros ejemplos de modelos bien conocidos utilizados para el análisis de la envolvente externa son el modelo de las 5 fuerzas de Porter y la matriz BCG.
En el caso del modelo de las 5 fuerzas, desarrollado por Michael Porter, este procura evaluar el atractivo de determinado sector o mercado. Según este modelo, el atractivo de un sector se mide por la amenaza de entrada de nuevos competidores, por el poder de negociación de los proveedores, por el poder de negociación de los clientes, por la presión de productos substitutos y por la rivalidad existente en el sector. Es el conjunto de estas fuerzas que determina el potencial de lucro final en el sector, que se define por el retorno a largo plazo sobre el capital invertido.
En cuanto a la matriz BCG, modelo utilizado principalmente para el planeamiento de portfolios de negocios, recurre a dos variables aisladas para efectuar el análisis: a tasa de crecimiento de mercado y la cuota de mercado relativa de la empresa. Según a los valores obtenidos para cada una de esas dos variables, el negocio se clasifica en cuatro tipos diferentes (Interrogación, Estrella, Vaca Lechera y Perro) siendo, para cada uno de ellos efectuadas recomendaciones genéricas sobre las estrategias a adoptar.