Los programas son planes más complejos que los procedimientos, ya que, a diferencia de aquellos que simplemente indican en términos generales las acciones que se desarrollan y plazos de entrega, los programas también indican los resultados que deben alcanzarse, las normas que deben respetarse, los pasos que se debe dar, los recursos necesarios, un presupuesto financiero y aún otros elementos que son necesarios para obtener los resultados previstos. A menudo se preparan subprogramas que forman parte de un programa más amplio. Por ejemplo, un programa de desarrollo de una nueva línea de productos por lo general incluye varios subprogramas, entre ellos un programa de investigación y desarrollo, un programa de fabricación, una selección de programas y selección de personal, un programa de capacitación y entrenamiento y programa de marketing. Una de las técnicas utilizadas para delinear un programa es el PERT (Program Evaluation and Review Technique)), que consiste en un gráfico que se compone de una red de eventos necesarios para ejecutar el proyecto, indicando las secuencias y plazos de entrega. En PERT se puede indicar también los costos previstos para cada evento.