Presentación de la Biblia
La Biblia (también designada Sagrada Escritura) es el conjunto de libros que según los cristianos habrán sido escritos por inspiración divina, por los cuales Dios se revela y da a conocer el misterio de Su voluntad. En el caso de la Biblia cristiana, ésta es dividida en dos grandes secciones: el Antiguo Testamento que contiene la revelación efectuada por Dios antes de la venida de Jesucristo al mundo y el Nuevo Testamento que contiene la revelación efectuada directamente por Jesucristo y transmitida por los apóstoles y otros autores sagrados. El Antiguo Testamento es una colección de 46 libros donde encontramos la historia del pueblo de Israel – muestra cómo surgió, como fue esclavizado Egipto, como le fue dada una tierra, como fue gobernado, como fueron sus relaciones con otros pueblos, como estableció sus leyes y como vivió su cultura y religión. En cuanto al Nuevo Testamento, es constituido por 27 libros, escritos tras las revelaciones de Jesucristo.
Historia Literaria de la Biblia
La formación de la Biblia, y en especial del Antiguo Testamento, fue muy lenta y complicada. La mayor parte de los libros que la componen son obra de diversos autores y la composición de algunos de ellos demoró varios siglos. Por ejemplo, el Pentateuco, que contiene la marca de Moisés, sólo conoció su forma definitiva muchos siglos tras su muerte y la literatura profética iniciada con Amós y Oseas en el siglo VIII a.C. apenas terminó en el siglo IV a.C. con Joel y Zacarías. Otros ejemplos son los casos de los libros históricos, que contienen tradiciones del siglo XIII a.C. y sólo fueron escritos alrededor del siglo I a.C., y el caso de la literatura sapiencial, iniciada con Salomón en el siglo X a.C. y que sólo 5 siglos más tarde recibió su forma definitiva. También los libros del Nuevo Testamento son fruto de la predicación oral de los apóstoles, de documentos litúrgicos, de colecciones, etc. Y que los evangelistas más tarde recogieron, ordenaron e interpretaron, dándole un sentido más profundo.