Alumnos con necesidades educativas especiales pueden o no tener una inteligencia igual o superior a la media, pero aprenden de forma diferente.
Sanches y Teodoro (2007) consideran que, para hablar de NEE, es necesario hablar de personas con discapacidad, las cuales tuvieron que luchar desde siempre contra la exclusión social, por lo que, para muchos, hoy día, la implementación de las NEE es dirigida a estos individuos, aunque, en realidad, ella sea atribuida tanto a individuos portadores de discapacidad, como a individuos con necesidades educativas específicas.
Correia (200) se refiere a alumnos con NEE, como aquellos que son aparentemente normales, pero que, por alguna razón no visible, tienen problemas de aprendizaje que afectan a su éxito escolar, principalmente en áreas relacionadas con la lectura, escritura y cálculo.
A lo que normalmente asistimos es a la justificación de los problemas de aprendizaje de los alumnos, con base en la zona en que reside, en la familia, en el grupo social en que se inserta, concluyéndose que deben ser esos puntos a cambiar (Freire, 2008).
Por ese motivo, se introdujo la inclusión en las normas educativas y sociales de los establecimientos de enseñanza, que vela por la participación de todos los alumnos en las actividades, con el fin de desarrollar todos su potencial, ejerciendo así su ciudadanía, con una educación de calidad, de acuerdo con sus necesidades específicas (Freire, 2008; Sanches, & Teodoro, 2007).
Alumnos con NEE tienen una inteligencia evaluada que puede ser igual o superior a la media, o sea, alumnos con dislexia, digrafía, discalculia, etc., lo que significa que tienen buen pronóstico (Correia, 2004).
Sanches y Teodoro (2007) destacan la importancia de los profesores de educación especial, cuyo apoyo, en colaboración con los profesores de la enseñanza normal, es fundamental para garantizar el éxito de estos alumnos, puesto que utilizan las estrategias adecuadas a las reglas y legislación vigentes para estos casos, de forma directa e individualizada.
El diagnóstico debe ser realizado por psicólogos con formación en la área, en el sentido de contornar la situación en colaboración con los profesores de la enseñanza normal, para que se pueda dar respuesta a las diferencias de aprendizaje de estos alumnos (Freire, 2008).
Legislación sobre las NEE
“Fue publicado, en Portugal, el 7 de enero de 2008 el decreto-ley 3/2008. Esta ley revocó la legislación que hasta entonces existía (concretamente el decreto-ley 319/91) ya con 19 años de publicación. (…) La población contemplada por los servicios de Educación Especial pasa a ser definida por el ámbito propuesto en la Clasificación Internacional de Funcionalidad de la Organización Mundial de la Salud (2007) (CIF). Y explícitamente determinado que los servicios de Educación Especial se destinan a “niños y jóvenes con límites significativos a nivel de la actividad y de la participación en uno o varios dominios de vida derivados de alteraciones funcionales de carácter permanente resultando en dificultades continuadas a nivel de la comunicación, del aprendizaje, de la movilidad, de la autonomía, de la relación interpersonal y de la participación social. Esta aproximación a los conceptos de la CIF se verifica también a nivel del proceso de evaluación en que es explícitamente indicado que la evaluación debe ser hecha “teniendo como referencia la CIF” (…)”
(Rodrigues, & Nogueira, 2010, p.4).
Partiendo de este presupuesto, Thomas, Walker e Webb (1998) proponen la siguiente adaptación en los programas:
- Observar la comunidad como un todo; si sus miembros son abiertos, positivos y diversificados; no excluye ni rechaza;
- No tiene barreras, accesible a todos en cuestiones físicas y educativas (currículum, apoyo y métodos de comunicación);
- Trabaja con, no es competitiva;
- Practica la democracia, la equidad.
(Thomas, Walker, & Wbb, 1998, cit in Sanches, & Teodoro, 2007, p.4).
De acuerdo con estas alteraciones, la educación exige cambios organizacionales y funcionales en los diferentes niveles de enseñanza, comenzando por la adaptación en clase, de los programas curriculares y de la actividad de enseñanza/aprendizaje (Freire, 2008).
Del mismo modo Sanches y Teodoro (2007) destacan la necesidad de adaptar la escuela a los diferentes ritmos de aprendizaje de sus alumnos, con los currículos adecuados en función de los mismos, con estrategias pedagógicas referenciadas y la debida cooperación de toda la comunidad escolar.
Se pretende, con estas alteraciones evitar la exclusión de estos alumnos, permitiendo que todos puedan participar en las tareas escolares y disminuir el abandono escolar debido al fracaso (Freire, 2008).
Conclusión
Verificamos que los alumnos con NEE son todos aquellos que, sin ser portadores de cualquier tipo de discapacidad, y teniendo un cociente de inteligencia igual o superior a la media, tienen dificultades de aprendizaje que los impiden tener rendimiento en su estudio. Por ese motivo es fundamental la educación inclusiva para alumnos con NEE, en el sentido de permitir medios de enseñanza adaptados a los mismos, con profesionales especializados que los ayuden de forma individualizada garantizando su éxito escolar, de acuerdo con la ley vigente.
References:
- Correia, L.M. (2004). Problematização das dificuldades de aprendizagem nas necessidades educativas especiais. Análise Psicológica 2 (xxii): 369-376. Acedido a 9 de Fevereiro de 2016 em http://publicacoes.ispa.pt/publicacoes/index.php/ap/article/view/197/pdf
- Freire, S. (2008). UM OLHAR SOBRE A INCLUSÃO. Revista da educação, Vol. Xvi, nº1. Acedido a 9 de Fevereiro de 2016 em http://repositorio.ul.pt/bitstream/10451/5299/1/Um%20olhar%20sobre%20a%20Inclus%C3%A3o.pdf
- Rodrigues, D., & Nogueira, J. (2010). Educação especial e Inclusiva em Portugal. Factos e opções. REVISTA EDUCACIÓN INCLUSIVA. Vol.3, nº 1.
- Sanches, I, & Teodoro, A. (2007). Procurando indicadores de educação inclusiva: as práticas dos professores de apoio educativo. Revista Portuguesa de educação. Vol. 20, nº2. P.105-149. Acedido a 9 de Fevereiro de 2016 em http://www.redalyc.org/pdf/374/37420205.pdf
