Qué es la Tuberculosis
La tuberculosis es causada por microorganismos de género Mycobacterium – el más prevalente es el Mycobacterium tuberculosis o Bacilo de Koch (BK). Esta enfermedad está más asociada a la enfermedad pulmonar, sin embargo, también puede surgir la enfermedad en otros órganos como la piel, los riñones o el cerebro.
Transmisión
Esta enfermedad se transmite a través del contacto con secreciones contaminadas, lo que puede ocurrir debido a la tos o estornudo de la persona infectada, o incluso a una conversación próxima. Sin embargo, los únicos individuos contaminantes son los que presentan tuberculosis pulmonar.
Tras el contacto con la bacteria pueden ocurrir tres situaciones:
- existe desarrollo de la enfermedad, pues el sistema inmunológico no consiguió controlar la enfermedad; comienzan a ocurrir los síntomas de tuberculosis pulmonar;
- no existe desarrollo de la enfermedad tras la infección; la bacteria se queda en el organismo en estado latente; sin embargo, si hubiera alguna depresión del sistema inmunitario, la bacteria puede quedar nuevamente activa. La mayoría de los casos de tuberculosis extra-pulmonar ocurre de esta forma;
- el sistema inmunitario consigue eliminar la bacteria del organismo, nunca ocurriendo la enfermedad, ni habiendo riesgo de ocurrir la enfermedad en el futuro.
Síntomas
La tuberculosis pulmonar es la manifestación más común de la enfermedad. Por ello, los síntomas serán muy parecidos a una infección pulmonar, presentando sudores, escalofríos, dolores en el pecho, expectoración con sangre, entre otros. Sin embargo, lo que distingue esta enfermedad de una neumonía es su desarrollo lento, que puede durar semanas; mientras la neumonía se establece más rápidamente, en el espacio de horas/días.
Tratamiento
Los enfermos que presentan síntomas son tratados durante 6 meses con un conjunto de medicamentos. Los portadores asintomáticos son tratados también durante 6 meses, pero apenas con un medicamento, normalmente la isoniazida.
