La Tortícolis Muscular Congénita es una asimetría localizada con una postura preferencial de la cervical y movimientos cervicales asimétricos que pueden estar presentes en el nacimiento o en los primeros meses de vida como resultado de un desequilibrio de la función muscular en la región cervical. Este desequilibrio puede estar asociado la mayoría de las veces a deformidades craneales.
Esta patología es más predominante en bebés del sexo masculino, bebés que nacen con exceso de peso, nacimientos múltiples (gemelos), anatomía pélvica desfavorable, primer embarazo, complicaciones durante el parto, uso de ventosas y/o fórceps, el trayecto del cordón umbilical y anormalidades uterinas maternas.
La etiología de esta patología es considerada idiopática. Sin embargo, surge generalmente asociada a episodios de trauma durante el parto, isquemia resultante de un suministro vascular anormal, ruptura muscular, miositis, factores hereditarios, síndrome compartimental y mal posicionamiento intrauterino del bebé. La posición de la cabeza en el útero o durante el parto puede llevar a una lesión selectiva del esternocleidomastoideo debido a un mecanismo de compresión localizada y no un estiramiento o rotura, como se pensaba previamente.
La fisiopatología incluye lesiones isquémicas, de reperfusión y neurológicas del esternocleidomastoideo, la fibrosis progresiva y la contractura que representan las secuelas de un síndrome compartimental intrauterino o perinatal. La anoxia derivada de un déficit del suministro vascular por isquemia del esternocleidomastoideo (ECM) estimula la formación de tejido fibrótico que puede resultar en acortamiento del mismo.
La deformidad presente en la Tortícolis Muscular Congénita resulta del proceso de deposición de colágeno y acumulación de fibroplastos alrededor de las fibras musculares, llevando a la fibrosis del endomisio y, consecuentemente a la atrofia muscular.
Las señales clínicas de la Tortícolis Muscular Congénita incluyen fibrosis o acortamiento del músculo esternocleidomastoideo; inclinación lateral de la cabeza en el plano frontal y rotación contralateral en el plano transversal con una notable limitación del arco de movimiento de la cervical, tanto activa como pasiva; nódulo palpable en el esternocleidomastoideo durante los primeros tres meses de vida, seguido de una restricción de la amplitud de movimiento y de una tortícolis postural fija; modificación de la morfología craneal relacionada con la plagiocefalia por achatamiento de la zona parieto-occipital y/o una anteriorización de la oreja contralateral al ECM afectado con achatamiento frontal homolateral al ECM afectado; posturas compensatorias de la columna cervical y torácica, tronco y extremidades, incluyendo la elevación del hombro y/o inclinación del tronco para el lado afectado.
Las Tortícolis Musculares Congénitas pueden ser clasificadas en dos categorías: las tortícolis con tumefacción del esternocleidomastoideo que incluye las tortícolis con tumefacción palpable, móvil y de consistencia dura y las tortícolis musculares que incluyen las tortícolis con contractura del ECM pero sin tumefacción palpable. Puede incluso considerarse un tercer grupo, las tortícolis posturales, que incluyen las tortícolis sin tumefacción ni contractura muscular del ECM. La tortícolis postural se desarrolla en situaciones de preferencia postural de la cabeza del bebé de carácter persistente, sin evidencia de cambios morfológicos del esternocleidomastoideo y puede ser inducida por plagiocefalia al nacer o por posicionar el bebé preferencialmente apenas de un lado durante los primeros cinco meses de vida.
En casos de existencia de un nódulo palpable en el esternocleidomastoideo es indicado que la fisioterapia sea iniciada hasta el segundo mes de vida, puesto que tiene una influencia negativa en el desarrollo motor normal del niño. Los principales objetivos de la fisioterapia en niños con Tortícolis Muscular Congénita son esencialmente prevenir deformidades faciales, craneales, normalizar la amplitud de movimiento de la cervical y minimizar los desequilibrios musculares y las alteraciones posturales existentes.