Concepto de Terapia Genética
La Terapia Genética es un método que incluye la modificación genética de células para tratar enfermedades. El potencial de la terapia genética es elevado en medicina.
La primera terapia genética fue realizada en la década de los 90 por científicos del National Institutes of Health. Ashanti DeSilva – la paciente – nació con inmunodeficiencia combinada grave y por eso no tenía un sistema inmunológico sano, volviéndola bastante vulnerable a infecciones. La inmunodeficiencia combinada grave se debe a defectos del sistema inmunitario, incluyendo la deficiencia de la enzima adenosina desaminasa.
En la terapia genética realizada en la paciente, los médicos utilizaron glóbulos blancos de su cuerpo. En laboratorio, introdujeron el gen que faltaba en las células. Por otro lado, estos glóbulos blancos genéticamente modificados fueron introducidos en la corriente sanguínea de la paciente. La terapia genética fortaleció el sistema inmunológico de la paciente sin embargo, este procedimiento no la curó y el proceso tuvo que ser realizado varias veces.
El desarrollo de estas técnicas es fundamental para que la terapia genética pueda ser utilizada adecuadamente. La terapia genética actúa a nivel molecular, eliminando el foco de la enfermedad, mientras la mayor parte de los fármacos curan apenas los síntomas. Es decir, la terapia genética actúa a nivel del genotipo en vez de tratar simplemente la expresión fenotípica.
Existen diversos sistemas de entrega de genes estudiados. La forma más simple de entrega es la simple inyección de ADN sin vectores de transporte. Sin embargo, ésta probó ser ineficiente debido a la dificultad en llegar hasta el núcleo de la célula. Además de la carga negativa de los grupos fosfato y la dimensión de la molécula dificultar su llegada, el ADN es también fácilmente fragmentado por nucleasas. La transfección de ADN para células puede ser realizada a través de diversas metodologías, tales como precipitación por CaCl, lipofección y electroporación. In vivo, la transfección viral es también utilizada en células animales, existiendo sistemas basados en adenovirus, lentivirus y virus adeno-asociados para aumentar la expresión en la entrega génica viral. Otros vectores como las nanopartículas han sido estudiados también.
La endocitosis tiene aquí un papel importante en la entrega génica, particularmente en los sistemas de entrega no virales, donde el gen tras la captación es transcrito y traducido intracelularmente. Los genes entregados, normalmente, por plásmidos tienden a sustituir genes ausentes o dañados.
La terapia genética es una tecnología revolucionaria que enfrenta varios desafíos. Uno de esos obstáculos es el hecho de este tipo de terapia ser más indicada para enfermedades monogénicas, a pesar de que la mayoría de las enfermedades son multifactoriales. También es un obstáculo y un problema grave si el gen es integrado en el lugar equivocado en el genoma. Esto puede inducir un tumor, si su inserción inactiva un gen supresor de tumor, o inactiva un gen en la vía de reparación enzimática de ADN. La utilización de estas terapias en células germinales es aún más controvertida en la medida en que puede tener consecuencias para generaciones futuras.