Estrategias Genéricas

Estrategias Genéricas corresponde a una expresión creada por Michael E. Porter y que designa los tipos de estrategias que una empresa puede seguir para obtener ventajas competitivas sobre sus competidores.

Según Porter, existen tres tipos de estrategias genéricas que una empresa pode seguir:

• Liderazgo en los costos: Según esta estrategia la organización procura ser el productor con menores costos en todo el sector. Su ámbito de actuación es amplio, procurando llegar a diversos segmentos de mercado en simultáneo, generalmente con un producto estándar y sin gran apuesta en los servicios no esenciales como el embalaje, el diseño, la publicidad, etc. Las fuentes de ventajas de coste, aunque variables de sector para sector, son, generalmente, las economías de escala e economías de experiencia, el aprovechamiento de sinergias comerciales o sinergias tecnológicas, la tecnología patentada, la localización y facilidad de acceso a los factores productivos y a los mercados de los clientes, entre otros.
• Diferenciación: Optando por la estrategia da diferenciación, la organización debe procurar ser única en su sector en lo que respeta a algunas áreas del producto/servicio más valoradas por los consumidores. Dependiendo del sector en que la organización actúa, estas áreas podrán ser las características del propio producto, o diseño utilizado, los plazos de entrega, las garantías, las condiciones de pago, la imagen, la variedad y calidad de los servicios asociados, la innovación, la proximidad en relación a los clientes, entre otras. Esta estrategia permite a la organización aplicar un precio superior u obtener una mayor lealtad de los consumidores.
• Enfoque: A través de la estrategia de enfoque, la organización procura obtener una ventaja competitiva en un segmento o en un grupo de segmentos de mercado por los cuales optó, excluyendo los restantes segmentos. La estrategia de enfoque puede ser dividida en enfoque en el costo (cuando la organización procura una ventaja de costo en su segmento objetivo) e en enfoque en la diferenciación (cuando la organización procura la diferenciación en su segmento objetivo). La cuestión base de esta estrategia es la selección de segmentos de mercado específicos donde la competencia tenga dificultad en satisfacer eficazmente las necesidades de los consumidores.

Porter describe aún el instrumento básico para diagnosticar la ventaja competitiva y para encontrar formas de  intensificarla: la cadena de valores. A través da cadena de valores, la organización se divide en sus actividades básicas (investigación y desarrollo, producción, comercialización y servicio) lo que facilita la identificación de las fuentes de ventaja competitiva.