Design Thinking… (expresión en inglés que se traduce al castellano como pensamiento de diseño) “es un proceso de pensamiento crítico y creativo que permite organizar información e ideas, tomar decisiones, mejorar situaciones y adquirir conocimiento.” – Charles Burnette
El Design Thinking (pensamiento del diseño) es una herramienta de innovación, un enfoque predominante de gestión, que utiliza a su favor los métodos y las técnicas que los diseñadores utilizan para resolver problemas. Una metodología creativa e innovadora que coloca a las personas en el centro de las soluciones como forma colaborativa de pensar y solucionar problemas. Es un modelo de pensamiento que va más allá de la necesidad de crear un producto o servicio. La idea es entrar en la vida del consumidor y tratar de dictar comportamientos y necesidades futuras.
Al utilizar estos métodos y procesos, el design thinking busca abordar desde diferentes ángulos y perspectivas un problema y así acelerar su solución, priorizando el trabajo colaborativo en equipos multidisciplinarios en busca de soluciones innovadoras. Deseando así, abordar problemas tradicionales de negocio bajo múltiples perspectivas, buscando ayudar a solucionarlos de manera más efectiva, conduciendo a nuevos caminos. Transformándose en una poderosa herramienta de innovación, además de su funcionalidad en la resolución de cuestiones dentro de una empresa o incluso para la sociedad.
Desde la década de 60 diversos campos de estudio (gestión, marketing, ingeniería y antropología) comenzaron a analizar y a comprender mejor la forma de usar la metodología del design thinking para resolver problemas. Durante la década de los 90 y 2000 los métodos relacionados con el design thinking se expandió a diversos campos de la gestión empresarial y en 2005 y 2007 se crearon las primeras escuelas y disciplinas de design thinking.
El concepto de design thinking vino para revolucionar la manera de encontrar soluciones innovadoras a los problemas, encontrando soluciones creativas enfocadas en las necesidades reales del mercado y no en las hipótesis estadísticas.
“Es una metodología que aplica herramientas del design para solucionar problemas complejos. Propone el equilibrio entre el razonamiento asociativo, que apalanca la innovación, y el pensamiento analítico, que reduce los riesgos. Posiciona a las personas en el centro del proceso, de principio a fin, comprendiendo a fondo sus necesidades. “Requiere un liderazgo impar, con habilidad para crear soluciones a partir del intercambio de ideas entre perfiles totalmente distintos.” (ABEJA y MELO, 2015 – p.14)
La primera información que debe quedar clara es que el design thinking no es una metodología, sino un enfoque que busca la solución de problemas de forma colectiva y colaborativa, en una perspectiva de empatía máxima con sus stakeholders (interesados): las personas se colocan en el ” el centro de desarrollo del producto – no sólo el consumidor final, sino todos los implicados en la idea (trabajos en equipos multidisciplinarios son comunes en este concepto).
El proceso consiste en intentar mapear y mezclar la experiencia cultural, la visión del mundo y los procesos insertados en la vida de los individuos, con el fin de obtener una visión más completa en la solución de problemas y, de esa forma, mejor identificar las barreras y generar alternativas viables para transponerlas.
Se trata de un enfoque preponderantemente “humano” y que puede ser usado en cualquier área de negocio. La razón de su existencia es la satisfacción del cliente (interno o externo), objetivo que sólo puede alcanzarse cuando conocemos en profundidad sus necesidades, deseos y percepciones de mundo.
El proceso de design thinking tiene 5 fases:
EMPATIZAR – Ver el mundo por los ojos de la otra persona. Colocarse en el lugar del otro, para entender mejor sus sentimientos, su comportamiento y sus deseos.
DEFINIR – Entender y desbastar la complejidad hasta llegar a la simplicidad. Destilar el problema hasta reducirlo a su esencia. Encontrar la definición del problema que va contra el punto de vista de quien necesita la solución.
IDEALIZAR – Buscar y aceptar ideas extrañas, e incluso inviables, como un camino natural. Escuchar las ideas de los demás. Explorar ávidamente nuevos espacios y abrazar la diversidad de ideas. La idea es, crear colaborativamente, el mayor número de ideas, para así encontrar la mejor.
PROTOTIPAR – Ver una idea en formato físico. Construir para pensar mejor. Ver el pensamiento. Concretar las ideas, para que otras personas puedan ver, criticar y contribuir.
TESTAR/EVALUAR – Recoger comentarios. Abandonar nuestras convicciones y aprender de los demás.
Design Thinking se centra en el ser humano, altamente colaborativo, experimental, optimista y visual. Así, hay que creer que se puede hacer la diferencia, desarrollando un proceso intencional para llegar al nuevo, impactar positivamente a las personas y crear soluciones de negocio innovadoras.
References:
ABELHEIRA, Ricardo & MELO, Adriana. Design Thinking & Thinking Design. Novatec Editora, 2015
ADLER, Isabel; LUCENA, Brenda; RUSSO, Beatriz, VIANNA, Maurício; VIANNA, Ysmar. Design Thinking: Inovações nos Negócio. MJV Press, 2011
BROWN, Tim. “The Making of a Design Thinker.” Metropolis, 2009
CROSS, Nigel. Design Thinking: Understanding How Designers Think and Work. Oxford; New York: Berg, 2011.
FRASER, Heather. Design para negócios na prática: Como gerar inovação e crescimento nas empresas aplicando o business design. Elsevier Brasil, 2012
NIXON, Natalie W. Strategic design thinking : innovation in products, services, experiences and beyond. New York : Fairchild Books, An imprint of Bloomsbury Publishing Inc., 2016
RODGERS, Paul. Articulating Design Thinking. Oxfordshire. Libri Publications Limited, 2012
STICKDORN, Marc & SCHNEIDER, Jakob. Isto é Design Thinking de Serviços: Fundamentos, Ferramentas, Casos. Bookman Editora, 2014
TRIPOLI, Marcelo. Meaningful Marketing: Como sua marca pode ter significado na vida das pessoas1. Clube de Autores, 2015