Qué es una Sociedad Offshore
Una sociedad offshore (u Offshore Company) es una entidad que se encuentra sediada en un país o territorio externo (relativamente al de la residencia de sus asociados) que ofrece un régimen fiscal diferente particularmente ventajoso, con tasas de impuestos muy reducidas o incluso nulas (generalmente designados como paraísos fiscales). Además del lugar de la sede, para ser considerada sociedad offshore es necesario también que la actividad no sea realizada en el territorio de registro de la empresa.
El término offshore es un anglicismo que en español significa ‘en el mar, alejado de la costa’ o ‘ultramar’, pudiendo también estar asociado a otras dimensiones más específicas como por ejemplo las utilizadas por el Cambridge Institute:
- Offshore, active movement of companies to offshore centres para designar compañías relacionadas con el petróleo, con el gas natural y con las plataformas de prospección de hidrocarburo, además de otras áreas importantes de negocios a operar en territorios generalmente no relacionados con la nacionalidad de sus poseedores/accionistas.
- Offshore Financial Centre para designar operaciones relacionadas con bajas tasas de interés y legislación jurisdiccional más simplificada y, por ello, más atractiva para los inversores no residentes (incluyendo fondos inversión – los Offshore Funds) o para que pretenda crear empresas altamente lucrativas.
- Offshore Bank para designar operaciones financieras con gran privacidad, baja o nula tasación, fácil acceso a los depósitos y elevada protección contra la inestabilidad financiera y política.
- Offshore Comany para designar una empresa que se incorpora en otra (la casa matriz) pero con sede en el exterior, para realización de operaciones primarias de la referida casa matriz.
- Offshore Investment para designar las operaciones de colocación de fondos en una jurisdicción diferente de aquella que existe en el país de residencia de su poseedor.
Razones para la utilización de Offshores
La principal razón para la utilización de offshore está generalmente relacionada con cuestiones tributarias. De hecho, es la elevada carga tributaria practicada en los países de origen que lleva a muchos investigadores a optar por los offshores y, así, pasan a beneficiar de tributación mucho más ventajosa tanto sobre los rendimientos como sobre las transacciones.
Pero existen otras razones como por ejemplo los problemas planteados por la legislación civil sucesoria (Derecho de las Sucesiones), la necesidad de mantener determinadas operaciones en sigilo, la fuga a la inestabilidad financiera, monetaria y política en los países de residencia o incluso la mayor libertad monetaria, la simplicidad administrativa y el eventual acceso a determinados tipos de financiamientos internacionales a precios más bajos.
Características principales de las Sociedades Offshore
Las offshore son entidades con personalidad jurídica que no se confunde con la personalidad de sus socios, siendo que sus actividades tienen como objetivo la producción o la circulación de bienes y servicios. Sin embargo, y a pesar de que poseen personalidad jurídica, las offshore no tienen necesariamente una determinada forma jurídica, adaptándose a las necesidades de cada caso específico. Cuando son sediadas en paraísos fiscales las sociedades offshore no pueden desarrollar sus actividades en esos referidos países, debiendo operar solamente fuera del territorio de la sede. Por ejemplo, si la offshore está sediada en Panamá, ésta no podrá operar en ese país, sino apenas en el exterior. Por otro lado, y en la mayoría de los casos, las empresas en ellas instaladas no podrán poseer bienes inmuebles, u otros bienes de cantidad expresiva en los territorios donde se encuentran sediadas.
En resumen, las sociedades offshore tienen tres características principales: (i) deben ser registradas en la jurisdicción escogida; (ii) el cliente debe ser residente fuera de la jurisdicción de registro; (iii) la sociedad debe realizar todos sus negocios fuera de su jurisdicción de registro, para no ser considerada como una sociedad residente.
En realidad, las empresas offshore son empresas lícitas y legalmente constituidas, pero fuera del país donde se localiza la sede de casa matriz, o el domicilio de sus legítimos interesados.
Cuentas Offshore
Relacionado con las sociedades están también las cuentas bancarias offshore, utilizadas tanto por particulares como por empresas. La principal razón para la apertura de este tipo de cuentas es la diversificación del riesgo (concretamente el designado riesgo país), la protección del patrimonio personal o incluso determinadas cuestiones familiares.
Crear una cuenta offshore implica un procedimiento muy semejante al aplicable a la apertura de una cuenta bancaria junto a un banco nacional (como por ejemplo la aportación de datos personales, información sobre el origen de los fondos, etc.). La elección de la jurisdicción varía bastante, siendo que generalmente es determinada no tanto por motivos fiscales sino más por las características de los productos bancarios ofrecidos o por cuestiones de confianza en la solidez de la institución financiera o del país.
