El Mercado Monetario Interbancario (MMI) es un mercado organizado entre bancos, los cuales realizan entre si operaciones de financiamiento a plazo (generalmente a corto plazo). En este tipo de operaciones, los bancos con liquidez excedentaria dan fondos a los bancos que se encuentren en la situación contraria.
En Portugal los fondos implícitos en este tipo de operaciones están representados por ingresos corrientes en el Banco de Portugal y su procesamiento y liquidación son hechas a través del Sistema de Transferencias Electrónicas de Mercado (SITEME). Pueden participar en este mercado todas las instituciones autorizadas por el Banco de Portugal que, teniendo establecido en territorio portugués, están sujetos al régimen de reservas mínimas del Banco Central Europeo (BCE) y aun las que por su naturaleza de su actividad o por el volumen de transacciones que realicen, asumen especial relevancia en el mercado monetario, desde que la participación en el MMI no les sea legalmente negada. Este tipo de operaciones pueden ser efectuadas con o sin garantía de títulos, siendo dominantes las operaciones sin garantía de títulos.