Absceso Periodontal se refiere a una lesión tumoral. Abscesos periodontales con exudado en los tejidos periodontales…
Abscesos periodontales con exudado en los tejidos periodontales, vulgarmente conocido como pus. Así como el absceso periapical puede ser definido por crónico o agudo. Es muchas veces confundido con el absceso periapical, a pesar de tener algunas diferencias tanto a nivel de forma (mientras que el absceso periapical está más localizado, el absceso periodontal está más generalizado, además mientras que el absceso periapical normalmente forma una fístula por donde drena el exudado, el absceso periodontal drena el exudado por la bolsa periodontal). Conforme su nombre indica, el absceso periodontal recibe ese nombre por el diagnóstico.
El absceso periodontal tiene dos causas frecuentes. En la mayoría de los casos el absceso se relaciona con la periodontitis o gingivitis (aunque es más frecuentemente relacionado con la periodontitis), donde la infección tiene origen en el biofilm (o placa bacteriana) que está presente en las bolsas periodontales. Pueden surgir también tras destartarizaciones que no eliminan completamente el cálculo subgengival y cuando el ligamento periodontal intenta adherir al diente es impedido por el cálculo. Esto puede desencadenar la formación de un absceso. Sin embargo, puede suceder que abscesos periodontales se formen por motivos no relacionados con la periodontitis. El impacto de un cuerpo extraño en la zona también puede causar abscesos. Anteriormente fue citado un cálculo dentario pero también podrían ser espinas de pescado, pedazos de huesos, hilo dental o cinta dental que impactan en un diente. El tratamiento para estas situaciones pasa en primer lugar por eliminar la causa del absceso.
Para el diagnóstico y clasificación de un absceso periodontal es importante evaluar las señales y síntomas clínicos y radiológicos. Una señal evidente de un absceso periodontal es una bolsa periodontal profunda (normalmente más profunda, alrededor de 6 milímetros o más). Otra señal muy común es la supuración a través de la bolsa (aunque puede admitir también, en casos raros, la supuración a través de una fístula). Además de ello, la región afectada es ovoide a lo largo de la porción lateral de la nariz. También, existe hemorragia al sondaje (pudiendo incluso no existir o ser menos evidente en casos de pacientes con hábitos de tabaquismo), y el diente frecuentemente sufre movilidad.
Los síntomas pueden incluir dolor, sensibilidad a la percusión, y en algunos casos, elevación de la temperatura corporal y linfoadenopatía regional. En el examen radiológico la imagen del tejido óseo demuestra en muchos casos pérdidas óseas y una región más oscura en las zonas del ligamento periodontal. Sin embargo, la observación radiográfica no puede dejar lugar a dudas sobre si es una lesión periapical o periodontal. La apariencia de los dientes son normalmente suficientes para realizar un diagnóstico diferencial en imagiología.
La presencia de caries en la región del absceso normalmente significa que estamos antes un absceso periapical y no de un periodontal.
El tratamiento del absceso periodontal pasa por varias fases. En primer lugar se efectúa el drenaje del absceso. Después es realizada una destartarización junto con un alisado radicular. Éste puede tener que ser realizado bajo anestesia debido a los dolores asociados al absceso. Al final del tratamiento, con frecuencia se ejecuta una irrigación con clorhexidina, no obstante, la clorhexidina tiene un potencial de penetración inferior a la yodopovidona, provocando muchas veces un cerramiento de la encía deficiente, siendo por ello preferible la irrigación con yodopovidona. Tras este tratamiento mecánico y con frecuencia químico se le explica al paciente cómo controlar la placa bacteriana en casa. En este momento se pueden utilizar varios medios de eliminación de placa bacteriana, a veces en conjunto. Cepillar los dientes, hilo dental, cepillos interdentales, irrigadores orales, son usados juntos y de acuerdo con las necesidades de los pacientes para el control de la placa bacteriana. Puede existir la regresión del absceso periodontal pero existe la necesidad de una constante observación por parte del profesional de salud.