Gestión (o Administración)
Aunque no sea posible encontrar una definición universalmente aceptada para el concepto de Gestión y, por otro lado, a pesar de este haber avanzado mucho a lo largo del último siglo, existe algún consenso relativamente a que este deba incluir obligatoriamente un conjunto de tareas que procuran garantizar la afectación eficaz de todos los recursos disponibles por la organización afín de ser alcanzados los objetivos pre-determinados.
Por otras palabras, cabe a la Gestión la optimización del funcionamiento de las organizaciones a través de la toma de decisiones racionales y fundamentadas en la recolección y tratamiento de datos e información relevante y, por esa vía, contribuir para su desarrollo y para la satisfacción de los intereses de todos sus colaboradores y propietarios y para la satisfacción de necesidades e intereses de sus stakeholders o de la sociedad en general.
De acuerdo con el concepto clásico inicialmente desarrollado por Henry Fayol, compete a la Gestión actuar a través de actividades de planeamiento, organización, liderazgo y control de forma a conseguir los objetivos organizacionales pre-determinados.
Para desempeñar las funciones descritas arriba, los gestores recurren muchas veces a técnicas ya experimentadas y demostradas científicamente. Por otro lado, utilizan también conocimientos de diversas disciplinas científicas tales como la matemática, las ciencias sociales y humanas, la economía, el derecho, entre otras. De aquí concluirnos que la Gestión puede ser considerada una ciencia en la medida en que admite una acentuada componente científica.
Con todo, la Gestión no puede ser considerada como una ciencia en la verdadera acepción de la palabra pues las teorías generales demostradas científicamente raramente son suficientes para el proceso de toma de decisiones. También es necesario algún conocimiento empírico (algunos le llaman arte) de forma a completar la distancia que separa las teorías generales de la realidad vivida en cada organización. Deriva de aquí la importancia de la experiencia y de la convivencia con las situaciones concretas vividas diariamente en el local donde se desenvuelve la acción. Esta es una de las principales razones presentadas por los defensores de la realización de prácticas en empresa después de la adquisición de los conocimientos técnicos durante el periodo escolar.
Áreas de la Gestión empresarial
Ya en el principio del siglo XX, Henry Fayol dividía la Gestión empresarial en diversas áreas funcionales especializadas, concretamente: técnicas o de producción, comerciales, financieras, de seguridad, de contabilidad y administrativas o de Gestión. Actualmente, siguen siendo consideradas un conjunto de áreas funcionales como:
- Gestión financiera
- Gestión de la producción
- Gestión de recursos humanos
- Gestión comercial
A parte de estas, se pueden aún considerar otras, que varían según la organización o empresa en causa, como a Gestión estratégica, a Gestión de stocks, a Gestión de negocios internacionales, la Gestión de calidad, la Gestión de las tecnologías y sistemas de información, entre diversas otras.